Peligros en la carretera
Manuel
| 14-06-2024
· Equipo de Vehículos
Las condiciones de la carretera tienen un impacto significativo en la seguridad de la conducción, incluidos los días de lluvia, los días de niebla, las carreteras heladas y nevadas y las carreteras embarradas.
Todas estas condiciones pueden plantear ciertos riesgos para la seguridad vial.
Impacto de los días de lluvia en la conducción segura:
Al conducir bajo la lluvia, la carretera se vuelve resbaladiza, la visibilidad se reduce y el coeficiente de adherencia de la carretera disminuye (la relación entre el esfuerzo de tracción para impulsar la rueda de una locomotora y su peso adhesivo), lo que la hace propensa a patinar. Por lo tanto, los conductores deben reducir la velocidad, mantener una distancia segura, evitar frenadas bruscas y prestar atención a controlar la velocidad y la estabilidad del volante.
Impacto de los días de niebla en la conducción segura:
La niebla reduce la visibilidad, lo que dificulta ver con claridad, y la superficie de la carretera se humedece, lo que aumenta el riesgo de colisiones traseras al seguir de cerca a otros vehículos.
Los conductores deben mantener la distancia, usar luces antiniebla y luces bajas, prestar atención a observar las condiciones de la carretera, evitar frenadas o aceleraciones repentinas y escuchar los sonidos de los vehículos y de la carretera para mantenerse alerta.
Impacto de las carreteras heladas y nevadas en la conducción segura:
Los principales efectos de las carreteras heladas y nevadas son superficies resbaladizas, estabilidad reducida del vehículo, peor rendimiento de frenado y luz que refleja la nieve, lo que hace que los conductores experimenten deslumbramientos e ilusiones. Los conductores deben reducir la velocidad, mantener una distancia segura, evitar frenadas bruscas y giros bruscos y prestar atención al control de la velocidad y la estabilidad del volante.
Impacto de las carreteras embarradas en la conducción segura:
Los caminos embarrados se caracterizan por superficies blandas y pegajosas, alta resistencia a la conducción, adherencia reducida y mayor riesgo de deslizamiento de las ruedas. Al utilizar los frenos, las ruedas son propensas a patinar o a colarse, lo que provoca accidentes de tráfico.
Los conductores deben reducir la velocidad, mantener una distancia segura, evitar frenadas bruscas y giros bruscos y prestar atención al control de la velocidad y la estabilidad del volante.
Otros factores que afectan la conducción segura:
Características del conductor
Factores como la edad, la experiencia de conducción, la educación, el historial médico y las emociones influyen significativamente en los errores e infracciones del conductor. Los estudios indican que los conductores más jóvenes enfrentan mayores riesgos de accidentes debido a su búsqueda de sensaciones y comportamiento al exceso de velocidad.
La velocidad del conductor se asocia constantemente con la probabilidad de riesgo de accidente, ya que una mayor velocidad del vehículo aumenta la energía cinética y el impacto de las colisiones.
Además, las velocidades más altas dan a los conductores menos tiempo para reaccionar ante situaciones críticas de seguridad. Los estados emocionales afectan significativamente el comportamiento de conducción, y la ira aumenta la carga cognitiva y aumenta 9,8 veces el riesgo de colisiones.
Distracciones
La distracción del conductor se refiere a desviar la atención de actividades cruciales para una conducción segura a actividades competitivas, mientras que la falta de atención del conductor se refiere a "una atención reducida a actividades cruciales para una conducción segura en ausencia de actividades competitivas".
La evidencia sugiere que las distracciones y la falta de atención debido a las demandas de tareas secundarias son las principales causas de accidentes, y las tareas secundarias incluyen el uso de dispositivos (por ejemplo, teléfonos), conversaciones con pasajeros, uso de sistemas de entretenimiento en el automóvil y verificación de instrumentos en el automóvil. Estas actividades desvían la atención del conductor de la conducción del vehículo.
La distracción del conductor se puede clasificar en tres tipos: distracción visual (mirar a los pasajeros o un teléfono), distracción manual (enviar mensajes de texto, usar sistemas de información y entretenimiento) y distracción cognitiva (conversaciones con pasajeros o por teléfono). Las distracciones visuales y manuales tienen el impacto más severo en el desempeño de la conducción, ya que requieren que el conductor aparte la vista de la carretera.
En conclusión, seguir prácticas de conducción segura adaptadas a las distintas condiciones de la carretera es fundamental para garantizar la seguridad vial y prevenir accidentes. Al permanecer alerta, ajustar la velocidad y mantener la distancia adecuada, los conductores pueden navegar en condiciones desafiantes con confianza y seguridad.