Magia del arte latte
Marta
| 04-06-2024
· Equipo de Comida
El arte latte representa una expresión única dentro del espresso, donde baristas expertos innovan continuamente diversos patrones para deleitar a los clientes y demostrar su profesionalismo.
El sello distintivo del latte art radica en la combinación armoniosa del espresso preparado por expertos y la leche perfectamente vaporizada, que sirven como lienzo para diseños intrincados.
El arrancado de flores, una técnica fundamental en el arte del latte, se basa en la base del espresso para crear hermosos diseños de espuma de leche. La esencia de cada patrón elaborado radica en la interacción científica entre la leche y los líquidos del espresso, lo que da como resultado una variedad de diseños complejos con técnicas de vertido similares.
Antes de realizar un extracción de flores, es imperativo permitir que la espuma de leche y el espresso se mezclen perfectamente
Cuando comienzas a servir el café, la espuma de leche se debe verter delicadamente desde aproximadamente 5 centímetros por encima de la superficie del café, con el objetivo de lograr un flujo fino, similar a una cola de ratón. Verter gradualmente la espuma de leche lo más cerca posible de la superficie del café permite una incorporación gradual, y la espuma se mezcla con el café en lugar de permanecer separada. Crear un diseño floral simétrico implica verter un líquido en otro, lo que requiere un enfoque cuidadoso para garantizar un patrón cohesivo. La fuerza que ejerce la espuma de leche al entrar en el café empuja el diseño floral hacia adelante, entrelazando la espuma blanca con el café espresso.
Mantener este equilibrio es crucial, ya que verter el café de manera demasiado constante desde el centro da como resultado un patrón que se extiende hacia afuera. Por el contrario, un vertido descentrado puede dar lugar a un diseño alargado y menos definido.
El volumen y la velocidad del flujo de espuma de leche desempeñan un papel fundamental a la hora de determinar la apariencia del patrón final. Verter un exceso de espuma de leche demasiado rápido corre el riesgo de alterar el delicado diseño ya formado en la base del café.
De manera similar, verter la espuma demasiado lejos de la superficie del café puede provocar salpicaduras, lo que resultará en un patrón desorganizado.
Es fundamental tener en cuenta que el aumento del caudal de espuma de leche debe realizarse después de bajar el pico de la jarra y no simultáneamente. Este proceso secuencial permite un flujo controlado de espuma de leche desde el fondo de la jarra, facilitando una colocación precisa en la superficie del café.
El proceso de ejecución de un arrancado de flores sigue una serie de pasos meticulosos:
Comienza inclinando la copa en un ángulo de 10 a 15 grados, con la boca a 1/3 de su capacidad.
Vierte una pequeña cantidad de espuma de leche para romper la tensión superficial del café.
Continúa vertiendo espuma de leche de manera constante y en pequeños incrementos hasta que la taza tenga 5/6. Baja la jarra de leche más cerca de la boca de la taza cuando aparezcan "puntos blancos" de espuma en la superficie del café. Aumenta el flujo de espuma de leche y agita la jarra en forma de Z, aproximadamente 1 cm por encima de la superficie del café, para crear un efecto de capas en forma de corazón.
Aplana lentamente la taza a medida que aumenta la espuma de leche, asegurando un vertido suave. Cuando la taza esté casi llena, levanta ligeramente la jarra y ajusta el flujo de espuma de leche para crear el punto central de la forma de corazón. Deja que un pequeño flujo de espuma de leche viaje desde la línea central hasta el borde de la taza. Completa el patrón recogiendo la espuma de leche en el borde de la taza, lo que da como resultado un corazón con la forma perfecta. Siguiendo estos meticulosos pasos y dominando el arte del latte art, los baristas pueden transformar una simple taza de espresso en una obra de arte visualmente cautivadora que deleita tanto la vista como el paladar.