Un Pastel Perfecto
Antonio
| 11-10-2024
· Equipo de Comida
Lykkers, en esta ocasión les traemos una receta que nunca falla, el pastel de mantequilla y vainilla. Este clásico es perfecto para cualquier evento, desde una celebración especial hasta una tarde de merienda tranquila.
Su equilibrio entre la suavidad de la mantequilla y la dulzura de la vainilla crea una experiencia irresistible en cada bocado. Lo mejor de todo, es que puedes prepararlo fácilmente en casa con ingredientes sencillos que quizás ya tengas en tu despensa.
Este pastel tiene una base versátil que se adapta a cualquier ocasión, y lo mejor es que puedes acompañarlo con una gran variedad de complementos. Desde frutas frescas que le aportan un toque fresco y natural, hasta una suave crema batida o incluso una bola de helado para los más golosos. Lo que realmente marca la diferencia es el irresistible aroma a mantequilla y vainilla que llena la cocina mientras se hornea, prometiendo una experiencia deliciosa desde el primer bocado. Cada minuto de espera vale la pena. ¡Así que no esperemos más y vayamos directo a la receta para que puedas disfrutar de este placer en casa!

Ingredientes esenciales:

Asegúrate de tener los siguientes ingredientes listos:
- 250 g de mantequilla a temperatura ambiente
- 250 g de azúcar
- 4 huevos grandes
- 1 cucharadita de extracto de vainilla
- 250 g de harina de trigo
- 1 cucharadita de polvo de hornear
- 1 pizca de sal
- 125 ml de leche

Para la cobertura (opcional):

- 200 g de mantequilla a temperatura ambiente
- 400 g de azúcar glas
- 2 cucharadas de leche
- 1 cucharadita de extracto de vainilla

Preparación paso a paso:

Preparación previa: Precalienta el horno a 180°C. Engrasa y enharina dos moldes redondos de 20 cm para que el pastel salga con facilidad.
Crema de mantequilla y azúcar: En una taza grande, bate la mantequilla con el azúcar hasta obtener una mezcla suave y cremosa. Este paso es crucial para lograr un pastel esponjoso, así que asegúrate de batir bien.
Incorporar los huevos y la vainilla: Agrega los huevos, uno a uno, asegurándote de batir bien después de cada adición. Añade el extracto de vainilla para darle ese toque aromático irresistible.
Mezclar los ingredientes secos: En otra taza, combina la harina, el polvo de hornear y la sal. Agrega esta mezcla poco a poco a la mezcla de mantequilla y huevos, alternando con la leche. Es importante mezclar suavemente para no perder el aire que hace que el pastel quede ligero.
Hornear: Vierte la masa en los moldes y hornea durante 25-30 minutos, o hasta que un palillo insertado en el centro salga limpio. Deja enfriar los pasteles en los moldes durante 10 minutos antes de desmoldarlos y colócalos sobre una rejilla para que se enfríen completamente.

Cobertura opcional

Si quieres darle un toque especial, puedes preparar una cobertura de mantequilla y vainilla:
Batir la mantequilla: Bate la mantequilla hasta que esté suave y cremosa.
Añadir el azúcar glas: Agrega el azúcar glas en varias tandas, batiendo bien después de cada adición. Si está demasiado espeso, puedes añadir una o dos cucharadas de leche.
Incorporar la vainilla: Finalmente, añade el extracto de vainilla. Esta cobertura le dará a tu pastel un acabado perfecto y delicioso.

Montaje

Coloca una de las capas de pastel en un plato. Unta una capa de la crema de mantequilla sobre la parte superior de manera uniforme, y luego coloca la segunda capa de pastel encima. Cubre todo el pastel con el resto de la crema, asegurándote de alisar bien los bordes. Para darle un toque final, decóralo a tu gusto con frutas frescas o virutas de chocolate.
El pastel de mantequilla y vainilla es una de esas recetas que nunca decepcionan. No solo es fácil de hacer, sino que además aporta un sabor clásico y reconfortante. Si estás buscando un postre que haga felices a todos, este es el indicado. Así que, manos a la obra, enciende el horno y disfruta del placer de hornear un pastel que siempre deja huella.
¡Hasta la próxima!