Secretos de los castillos
· Equipo de Fotografía
Cuando nos propusimos explorar el castillo de Muiden (Muiderslot), nos encantó de inmediato su encanto medieval con una cautivadora pieza de la historia holandesa.
Ubicado en la pintoresca ciudad de Muiden, a un corto trayecto en coche desde Ámsterdam, Muiden se alza como uno de los castillos mejor conservados de los Países Bajos. Sus imponentes almenas y su pintoresco foso ofrecen un entorno pintoresco que parece sacado de un cuento de hadas.
Nuestra aventura comenzó con un tranquilo paseo por los terrenos del castillo, donde los exuberantes jardines y las serenas aguas del foso crean un tranquilo telón de fondo. El castillo, construido originalmente en 1285, es un tesoro de historia y arquitectura. Mientras nos adentrábamos en sus pasillos y cámaras, nos recibieron con exposiciones que detallaban su pasado histórico, desde su papel en la defensa medieval hasta su uso posterior como residencia.
Uno de los aspectos más destacados de nuestra visita fue explorar las distintas salas, incluido el gran Salón de los Espejos y la cocina medieval. Cada espacio está meticulosamente restaurado, lo que ofrece una visión de la opulenta vida de los antiguos habitantes del castillo. Las características defensivas del castillo, como el puente levadizo y las almenas, proporcionaron información fascinante sobre la importancia estratégica del castillo de Muiden durante su apogeo.
Descubrimos que el castillo está abierto a los visitantes todos los días de 10:00 a 17:00 horas. Los precios de las entradas son bastante razonables: 15 € para adultos, 12,50 € para personas mayores y 10 € para niños de 4 a 11 años. Para las familias, también hay una entrada combinada disponible para el castillo y el cercano Museo del Castillo de Muiden en Ámsterdam.
Para hacer un descanso de nuestra exploración del castillo, nos dirigimos al encantador restaurante del castillo. El café ofrece una deliciosa selección de cocina holandesa, incluidos platos tradicionales como el "Haring" (arenque crudo servido con cebollas y pepinillos) por unos 7 € y las "Bitterballen" (albóndigas fritas) por 5 €. Disfrutamos de un abundante "Stamppot (puré de patatas con verduras y embutidos)" por 15 €, que complementaba perfectamente el ambiente histórico.
Nuestra visita a Muiden no se limitó a ver artefactos, sino a sumergirnos en una era pasada. La combinación de historia, arquitectura y delicias culinarias locales hizo que fuera una experiencia memorable. Si buscas viajar al pasado y saborear la tradición holandesa, el castillo de Muiden es el destino ideal para una escapada histórica.
Lykkers, ¡nos encantaría saber qué piensas sobre nuestro viaje por Muiden! ¿Has visitado este encantador castillo o lo tienes en tu lista de deseos de viaje ahora?
Comparte tus pensamientos y cualquier experiencia que hayas tenido en los comentarios a continuación. Estamos ansiosos por leer tus historias y recomendaciones. ¡Sigamos conversando!