¿Estás listo para recorrer los senderos pero no sabes por dónde empezar? Aprender a montar en bicicleta de montaña puede parecer intimidante, pero con algunos consejos clave, ¡puedes dominar los conceptos básicos en solo cinco minutos!

¡Gracias! Si eres un principiante absoluto o buscas mejorar tus habilidades, esta guía rápida te ayudará a empezar con confianza.

Paso 1: Elige la bicicleta adecuada

Antes de comenzar, asegúrate de tener la bicicleta de montaña adecuada. Elige una bicicleta que se ajuste a tu tamaño y al tipo de terreno en el que montarás. Esto es lo que debes buscar:

1. Tamaño del cuadro: la bicicleta debe ser cómoda y adaptarse a tu altura. Una comprobación rápida: párate sobre el cuadro de la bicicleta con ambos pies apoyados en el suelo. Debes tener aproximadamente 2-3 pulgadas de espacio libre entre tú y el tubo superior.

2. Tipo de suspensión: para principiantes, una bicicleta rígida (solo suspensión delantera) es más fácil de manejar. Las bicicletas con suspensión total (suspensión delantera y trasera) ofrecen más comodidad en terrenos difíciles, pero requieren más habilidad para manejarlas.

Paso 2: Consigue el equipo adecuado

La seguridad es primordial, así que asegúrate de estar equipado con el equipo adecuado:

1. Casco: usa siempre un casco que se ajuste bien. ¡No es negociable!

2. Guantes y protectores: los guantes acolchados protegen tus manos, mientras que las rodilleras y coderas brindan protección adicional en caso de caídas.

3. Ropa: usa ropa cómoda que absorba la humedad. Los pantalones cortos de ciclismo con acolchado son una excelente opción para mantenerte cómodo en recorridos más largos.

Paso 3: aprende los conceptos básicos de equilibrio y frenado

Siéntete cómodo en la bicicleta practicando el equilibrio y el frenado. Aquí te explicamos cómo:

1. Encuentra tu centro de gravedad: siéntate en el sillín, coloca los pies planos sobre el suelo y siente cómo se mueve la bicicleta debajo de ti. Practica el equilibrio balanceándote suavemente de un lado a otro.

2. Practica el frenado: las bicicletas de montaña tienen frenos potentes, así que practica el uso de los frenos delanteros y traseros con suavidad. Siempre aplica ambos frenos al mismo tiempo para evitar derrapar o volcar.

Paso 4: comienza a andar, pero hazlo simple

¡Ahora es el momento de comenzar a andar! Busca un área plana y abierta con mínimos obstáculos.

1. Pedalea a un ritmo cómodo: comienza con una marcha baja y pedalea a un ritmo constante y cómodo. Mantén el cuerpo relajado y los ojos mirando hacia adelante.

2. Practica los giros: intenta hacer giros suaves para sentir cómo responde la bicicleta. Inclina el cuerpo en la dirección del giro mientras mantienes los brazos y los hombros relajados.

Paso 5: aprende a manejar obstáculos

El ciclismo de montaña a menudo implica sortear obstáculos como rocas, raíces y pequeños desniveles. Aquí tienes una guía rápida:

1. Mira hacia adelante: siempre mantén la vista enfocada a unos 3 o 4,5 metros por delante de ti para detectar obstáculos con anticipación.

2. Levanta la rueda delantera: para evitar obstáculos, practica levantar la rueda delantera desplazando el peso hacia atrás y tirando del manillar hacia arriba.

3. Mantente relajado: mantén los brazos y las piernas ligeramente flexionados para absorber los impactos y mantener el equilibrio.

En solo cinco minutos, has aprendido los conceptos básicos del ciclismo de montaña. ¡Ahora es el momento de aplicar lo aprendido y salir a los senderos! Comienza con senderos fáciles, gana confianza y, muy pronto, estarás conquistando rutas más desafiantes. Recuerda, la práctica hace al maestro, así que sigue montando, sigue aprendiendo y, lo más importante, ¡diviértete!