Italia es una de las cunas de la cultura del café, y sus tradiciones únicas en torno al café están profundamente arraigadas en la vida cotidiana de los italianos.

Ya sea la primera taza de café de la mañana o una charla informal con amigos por la tarde, el café ocupa un lugar preciado en los corazones de los italianos. ¡Adentrémonos en la distintiva cultura del café de Italia y exploremos sus aspectos únicos!

1. ¿Quieres sentarte o estar de pie?

En Italia, hay dos formas principales de disfrutar el café: de pie en la barra (al banco) o sentado en una mesa (al tavolo). Si eliges estar de pie en la barra, puedes saborear una taza de espresso por solo 1 euro (aproximadamente 1,06 dólares estadounidenses).

Esta opción rápida y económica te permite experimentar la auténtica cultura del café italiano como un local.

Por otro lado, si prefieres sentarte en un restaurante o cafetería y que te sirva el café un camarero, te costará unos 2 euros. Aunque esta opción es el doble de cara que tomarlo de pie, sigue siendo mucho más barata en comparación con los precios en ciudades como Singapur.

Curiosamente, en Italia, normalmente pagas el café después de beberlo, lo que te permite relajarte y disfrutarlo sin prisas.

2. No lleves el trabajo a la cafetería

En Italia, las cafeterías se consideran espacios sagrados para la relajación y la socialización. A diferencia de muchos otros países, no verás a gente escribiendo en sus portátiles o consultando constantemente sus teléfonos en las cafeterías italianas.

Para los italianos, una cafetería es un lugar para disfrutar de una bebida y compartir sentimientos e historias con amigos, no un lugar para mejorar la productividad laboral. Este énfasis en disfrutar el momento y conectar con los demás es un aspecto central de la cultura italiana del café.

3. Un país sin cadenas de cafeterías

La arraigada cultura del café en Italia significa que no encontrarás cadenas de cafeterías internacionales como Starbucks dominando el mercado local. En cambio, Italia es el hogar de innumerables cafés independientes, cada uno con su encanto e historia únicos. Estos establecimientos han estado sirviendo café italiano tradicional durante generaciones, preservando la rica herencia y los sabores auténticos del café italiano.

4. Si deseas pedir un espresso, lo que debes pedir es...

En Italia, cuando pides un "caffè", estás pidiendo lo que se conoce internacionalmente como espresso. Este espresso se prepara utilizando una máquina de café neumática y está cubierto con una capa de crema, la capa rica y espumosa en la superficie.

A diferencia del espresso amargo que puedes encontrar en otros lugares, el caffè italiano es típicamente suave, con un ligero aroma tostado y un toque de dulzura. Si siempre has tenido problemas con la amargura del espresso, probarlo en Italia podría cambiar tu perspectiva.

5. Bebe café con espuma solo por la mañana

Los italianos tienen reglas específicas sobre cuándo beber ciertos tipos de café. El café con espuma, como el capuchino, se consume tradicionalmente solo antes de las 11 a. m., ya que la leche se considera un ingrediente del desayuno.

Pedir un capuchino por la tarde puede hacerte ganar algunas miradas de desaprobación de los lugareños. Además, si pides un "latte" en Italia, simplemente te darán un vaso de leche. Para pedir café con leche, debes pedir un "caffè latte".

6. No te lleves el café

En Italia, no es habitual llevar café para llevar. En los cafés italianos no encontrarás vasos de papel o plástico para el café para llevar.

Los italianos creen que nada es más importante que la experiencia del café en sí, que debe disfrutarse tranquilamente en el café. Esta tradición subraya el valor italiano de tomarse el tiempo para apreciar los pequeños placeres de la vida.

La cultura italiana del café es una tradición rica y multifacética que va más allá del simple acto de beber café. Encarna una forma de vida que valora la calidad, la comunidad y la alegría de saborear cada momento.

Para cualquier persona que ama el café, sumergirse en las tradiciones cafeteras de Italia es una necesidad, lo que te permitirá apreciar más profundamente esta querida bebida y la vibrante cultura que la rodea.