El pastel, un postre muy apreciado, desempeña un papel crucial en casi todas las celebraciones.

Su rica historia es un tapiz de anécdotas poco conocidas que muestran su evolución desde sus humildes comienzos hasta los intrincados y variados pasteles que disfrutamos hoy.

Los orígenes de los pasteles

El término "pastel" se deriva de la palabra nórdica "kaka", lo que refleja sus raíces vikingas. Los primeros pasteles eran bastante diferentes de los dulces y decorados que conocemos hoy.

Los primeros pasteles, que eran más parecidos al pan, fueron elaborados por los antiguos egipcios. Estos primeros pasteles eran esencialmente pan endulzado con miel. Sin embargo, algunas fuentes sugieren que los antiguos babilonios podrían haber sido fundamentales para enseñar a los egipcios el arte de la repostería. Las representaciones artísticas de alrededor de 1175 a. C., particularmente en la corte de Ramsés III, ilustran salas de horneado donde se elaboraban pasteles y pan. Es probable que estos pasteles antiguos fueran rudimentarios en comparación con los estándares modernos. Aun así, representan las primeras etapas de lo que se convertiría en una rica tradición de repostería.

Los griegos y los romanos contribuyeron significativamente a la evolución de los pasteles. Los griegos crearon las primeras formas de tarta de queso, utilizando una mezcla de queso y miel. Al mismo tiempo, los romanos desarrollaron pasteles de frutas, incorporando pasas, nueces y otras frutas. A mediados del siglo XVII, la tecnología de la repostería había avanzado considerablemente en Europa y la disponibilidad de ingredientes aumentó. Este período marcó una transformación significativa en la elaboración de pasteles, lo que llevó a los pasteles redondos y glaseados que comenzaron a popularizarse.

El glaseado se hacía con azúcar, claras de huevo y varios aromas en esa época. Estos pasteles a menudo contenían frutas secas como pasas y cidras. A pesar de estos avances, los pasteles siguieron siendo un artículo de lujo debido al alto costo de los ingredientes dulces como el azúcar y el chocolate.

La tradición de los pasteles redondos

Si bien técnicamente los pasteles se pueden hornear en cualquier forma, los pasteles redondos se han convertido en una opción tradicional. Existen razones prácticas y simbólicas para esta preferencia.

Originalmente, los pasteles se moldeaban a mano y, a medida que se horneaban, se expandían naturalmente hasta tener una forma redonda. En la repostería moderna, los aros y moldes para pasteles garantizan una forma redonda uniforme, pero la tradición persiste.

Una explicación más simbólica de la forma redonda de los pasteles tiene sus raíces en creencias antiguas. En épocas anteriores, los pasteles se usaban a menudo en rituales y ofrendas. Se creía que la forma redonda del pastel simbolizaba la naturaleza cíclica de la vida y de los cuerpos celestes: el sol y la luna. Esta conexión con lo divino podría haber influido en la preferencia continua por los pasteles redondos en diversas culturas y tradiciones.

La evolución de la tarta de cumpleaños

La tradición de celebrar los cumpleaños con tartas es particularmente intrigante. En la antigua Grecia, las tartas se utilizaban para honrar a las deidades, en particular a la diosa Artemisa.

Para celebrar su nacimiento, la gente horneaba tartas redondas que representaban la luna, adornadas con velas para imitar el brillo de la luna. Esta práctica sentó las bases de la tradición moderna de las tartas de cumpleaños.

En el siglo XIII, surgió una nueva costumbre en Alemania: las tartas de cumpleaños con velas. Estas velas simbolizaban la luz de la vida y la continuidad de la edad. Al principio, las velas se quemaban durante todo el día y se reemplazaban si se apagaban. Antes de consumir la tarta, se apagaban las velas y la persona que cumplía años pedía un deseo. La creencia era que el humo llevaba el deseo a los cielos, una tradición que continúa hasta el día de hoy. Hasta el día de hoy, la gente pide deseos secretos antes de apagar las velas de cumpleaños, con la esperanza de que sus deseos se hagan realidad.

La tarta moderna

La evolución de la tarta ha continuado hasta la era moderna, con infinitas variaciones e innovaciones. Los pasteles de hoy no son solo cuestión de sabor, sino también de arte y personalización. Desde elaborados pasteles de boda hasta pasteles de cumpleaños sencillos pero elegantes, las posibilidades son tan diversas como las culturas que los celebran.

La tecnología de repostería moderna ha introducido numerosas herramientas y técnicas, lo que permite a los panaderos crear pasteles con diseños y sabores intrincados. La introducción de nuevos ingredientes y sabores ha ampliado aún más la variedad de pasteles disponibles, haciéndolos accesibles a un público más amplio. Los pasteles ya no son solo un lujo, sino un elemento común en las celebraciones, gracias a los avances en repostería y la disponibilidad de ingredientes. Ya sea que se disfruten como parte de una ocasión festiva o como un capricho diario, los pasteles se han ganado su lugar en nuestras vidas como símbolos de alegría, creatividad y tradición.

A medida que sigamos explorando nuevos sabores y técnicas, la historia de los pasteles sin duda seguirá evolucionando, ofreciendo dulces experiencias y recuerdos preciados para las generaciones venideras.